Home / Jugar proyectos y semifaroles: Parte 2

Jugar proyectos y semifaroles: Parte 2

agosto 5, 2020
de Dave Roemer

En la primera parte definimos los semifaroles y hablamos de las ventajas e inconvenientes de jugar los proyectos de forma agresiva. También tocamos el tema de la importancia de utilizar una estrategia equilibrada en lo que respecta a ser pasivo y agresivo con los proyectos. En esta segunda parte, vamos a hablar sobre otras cosas a tener en cuenta cuando escogemos nuestra línea de acción.

Una cosa que debemos tener en cuenta es si nuestra mano realmente tiene la oportunidad de ganar en la confrontación final sin mejorar. La fuerza del semifarol reside en equilibrar la probabilidad de que nuestros rivales se retiren (equity de retirada) y abandonen manos mejores, mientras conservamos nuestras opciones de que se complete nuestro proyecto y que nos paguen. Hacer que un contrincante se retire es una muy buena opción cuando llevamos, por ejemplo, un proyecto de color al ocho. Algo como 8 7 en un flop K 3 2. No puedes esperar ganar en la confrontación final con un 8 como carta alta. Pero ¿qué pasa si en su lugar tuviésemos un flop con K 3 [8p]? En este caso tendríamos un proyecto de color con un par de ochos, y este par podría ganar algunas veces en la confrontación final sin necesidad de mejorar. Cuando contamos con cierto valor para la confrontación final (como un par o un as bien acompañado si solo está en la mano un adversario), deberíamos jugar nuestro proyecto de forma más pasiva para llevar estas manos a la confrontación final invirtiendo menos, sobre todo frente a un contrincante agresivo.

Y esto nos lleva a varias líneas de acción para maximizar la rentabilidad frente a varios tipos de contrincantes. Si estuviésemos en un pozo contra un jugador muy fuerte que usa estrategias equilibradas, idealmente, nos interesaría que haya algunos proyectos en nuestro rango para igualar y algunos en nuestro rango para subir para equilibrar nuestro propio juego, tal y como comentamos en la primera parte. Contra un jugador fuerte, es fundamental que, cuando se complete el proyecto, exista la posibilidad de que lo llevemos, sin importar si hemos jugado la calle anterior de forma agresiva o pasiva. ¿Qué pasa con los jugadores que se desvían de esta estrategia equilibrada y de los cuales nos podemos aprovechar? Bueno, deberíamos hacerlo. Ahora vamos a hablar sobre algunas categorías generales. Al hacer esto, sé por experiencia propia que algunos lectores las mirarán con lupa y dirán que son demasiado rígidas, que no se aplican a un rango lo suficientemente amplio de rivales, etc. Es evidente que “conservador-pasivo” es una generalización y que puede haber muchos jugadores que encajen en esta categoría que hagan las cosas de formas diferentes durante una partida. Recuerda que estas son simplemente categorías generales: siempre debes ajustarte a los rivales concretos, de tal forma que tenga sentido explotar sus errores de una forma concreta específica. Dicho esto, metámonos de lleno en el tema y veamos cómo podemos ajustar nuestro juego con proyectos frente a algunos tipos generales de jugadores:

Conservador-pasivo: los jugadores conservadores-pasivos son un objetivo fantástico para los semifaroles. Se retiran con demasiada frecuencia y no nos obligarán a abandonar nuestro proyecto con una subida, incluso aunque tengan una mano muy fuerte. Además, y debido a la naturaleza “asustadiza” de su estilo de juego en general, son el tipo de jugador que es menos probable que nos pague cuando sí completemos nuestra mano. En consecuencia, no tiene mucho sentido jugar los proyectos de forma pasiva contra ellos. El componente de “farol” de nuestro semifarol es fuerte, así que tiene sentido usarlo a nuestro favor y aprovecharnos de él.

Arriesgado-pasivo: los jugadores arriesgados-pasivos son un mal objetivo para los semifaroles. El problema es que el componente de “farol” es mucho más bajo de lo normal es estos casos. Esto es especialmente así contra los jugadores arriesgados-pasivos más recalcitrantes, los calling stations (jugadores que igualan en casi cualquier situación). Pagan llevando manos muy mediocres… lo que casualmente es una estrategia efectiva contra jugadores que van de farol en exceso. Así que no vayas de farol contra ellos. Sin embargo, no todo son malas noticias, no hasta el punto de que no debamos intentar el semifarol con proyectos contra ellos. Para empezar, su tendencia a la pasividad nos permitirá conseguir más cartas gratis para completar nuestros proyectos. Dicho esto, aun cuando no completemos, deberíamos retirarnos con frecuencia cuando obtenemos cartas gratis o invirtiendo poco y sí mejoramos; este es el tipo de jugador que probablemente nos pague, incluso si apostamos fuerte. Contra los tipos de jugador arriesgado-pasivo, tiene sentido jugar nuestros proyectos de forma más pasiva, recibir las cartas gratis que nos ofrecen y apostarles por valor cuando completemos nuestra mano.

Arriesgado-agresivo: este tipo de rival es un objetivo decente para los semifaroles. Juegan rangos más amplios, lo que significa un rango global más débil, con más cartas de mano débiles, lo que los hace más vulnerables frente a la agresión. Este tipo de jugador quizá sea el que con más frecuencia nos obligue a tirar nuestro proyecto con una subida (o, al menos, lo intentará), así que resulta apropiado incluir en nuestros proyectos alguna línea de juego pasiva que busque cartas gratis. En particular, los proyectos que cuentan con cierto valor de confrontación final, como un par o un as como carta alta bien acompañado, son especialmente convenientes para incluirlos en esta categoría. Nuestros rivales arriesgados-agresivos puede que se animen a ir de farol con más frecuencia frente a líneas de acción en apariencia débiles, así que estas manos pueden ser muy útiles como cazafaroles, al tiempo que nos garantizan que podremos aprovechar nuestra probabilidad de completar el proyecto de una mano muy fuerte.

Conservador-agresivo: estos jugadores también son buenos objetivos para el semifarol. Saben encontrar espacios para retirarse, pero también es más probable que nos paguen debido al precio que les ofrece el pozo cuando no se retiran frente a nuestro farol y nosotros acabamos completando la mejor mano. Además, este es el tipo de jugador que tiene más opciones de ubicarnos en un rango, así que adoptar una aproximación equilibrada y solo igualar con algunos proyectos y subir con otros resulta esencial. Podemos escoger subir con nuestros proyectos más débiles y con los más fuertes, e igualar con el resto de los proyectos intermedios. Por ejemplo, digamos que tenemos un flop con K 4 5. Podemos optar por subir con una mano como 8 6. Este es uno de los proyectos más débiles que podemos tener en esta mesa: un proyecto de escalera interna que incluye la posibilidad de completar un color para el que necesitamos dos cartas. Y no tenemos cartas superiores a las que hay en la mesa. Puesto que la probabilidad de ganar de nuestra mano es bastante baja, necesitamos que el componente de “farol” de nuestro semifarol respalde nuestras opciones para continuar en la mano de forma rentable. Y si nos suben, será fácil retirarse. Por el contrario, si tenemos un proyecto como 7 6, la probabilidad de ganar de nuestra mano es tan alta (con un proyecto de escalera de color a dos puntas) que podemos afrontar una subida e incluso jugarnos el resto con el pozo cubierto porque tenemos muchas opciones para llevarnos la mano. Si se retiran con nuestra subida, fantástico, nos lo llevamos con un 7 como carta alta; y si nos suben, podemos resubir y poner nuestro dinero en juego. Si usamos esta estrategia contra los rivales conservadores-agresivos, mostraremos un equilibrio en nuestros rangos que hará que les resulte más difícil jugar contra nosotros.

 

En resumen, cuando nos planteemos cómo actuar con un proyecto, no nos conformaremos con igualar o subir en todas las calles a ciegas. Piensa en cómo maximizar el valor y aprovecharte de las debilidades de tus contrincantes. Cuanto mayor sea la posibilidad de que se retiren, mayor será el valor que ganes presionando. Si es más probable que un jugador te pague una apuesta muy grande, resultará más atractivo buscar nuestro proyecto invirtiendo pocas fichas. ¡Cualquier línea de juego que funcione para explotar los errores más frecuentes de los rivales mejorará el valor a largo plazo de tus proyectos!

 

Publicaciones más recientes

Estudia al poker con Pokerstars Learn, practica con la aplicación de PokerStars