Adaptarse a tener pilas grandes en los torneos
Tener una gran pila de fichas en un torneo siempre es una ventaja. Sabemos esto de forma intuitiva y constantemente lo oímos en comentarios genéricos como “tener muchas fichas te da más margen de maniobra”, “cuentas con más espacio para ser creativo”, “hay más oportunidades para presionar” o “tienes más margen para ser paciente”, entre otros. Pero ¿qué significan realmente todas estas afirmaciones y cómo se pueden trasladar a un plan de acción razonable? Vamos a echar un vistazo a algunos factores para tener en cuenta.
¿Tus contrincantes saben cómo has conseguido tu gran pila de fichas? Si es así, tiene sentido incorporar esta información a tu estrategia. ¿Te han visto jugar de forma conservadora, pero te hiciste con tus fichas en un cooler del tipo “trío contra trío superior”? Con una imagen conservadora, podrás robar fichas con tus subidas y resubidas de forma más efectiva. ¿Estabas jugando de forma arriesgada-agresiva y completaste una mano extraña con cartas de mano intermedias? Hacer faroles será más difícil. Claro que esto solo va a ser un factor que hay que tener en cuenta contra jugadores que estuviesen presentes en la mesa; una vez te cambian a una nueva, no sabrán cómo conseguiste todas tus fichas, simplemente verán que las tienes.
Sé paciente. Para ser claro: ser paciente no significa esperar a que entren manos premium. Lo que quiero decir es que no tienes la misión de arrasar en la mesa ahora que cuentas con una gran pila de fichas. No es una obligación personal enfrentarte a los jugadores con menos fichas que vayan all-in y pagarles con manos marginales. Todavía puedes seleccionar las situaciones, atacar en momentos en los que la probabilidad de que se retiren (equity de retirada) sea alta y, por supuesto, con las manos más fuertes, simplemente por valor.
Mantén el autocontrol. Es natural querer pasar al ataque con una gran pila de fichas, ya que no existe una presión inmediata sobre tu supervivencia en el torneo, pero tus rivales sí la suelen tener, sobre todo los que tienen pilas pequeñas y medianas. No dejes que esa sensación, que es natural, te ciegue frente a los peligros de volverte excesivamente agresivo. Lo peor que te puede pasar es que tu gran pila de fichas disminuya. La forma más fácil de que esto suceda es perder fichas yendo de farol.
Ahora veamos unas cuantas cosas que deberías intentar hacer con todas esas fichas:
Amplía los rangos de apertura antes del flop. Siempre que los jugadores de tu mesa te permitan llevarte más pozos pequeños con rangos de apertura más amplios, es una buena idea adaptarte a ellos y aprovechar esa situación. Cuando tienes una gran pila de fichas, tus rivales, de forma natural, tienden a evitar enfrentarse contigo, ya que podrían poner en riesgo su supervivencia en el torneo.
Sé un poco más cauto tras el flop. Aunque ampliar tus rangos de apertura antes del flop puede jugar a tu favor por los motivos anteriormente comentados, un aspecto de esta estrategia que generalmente se pasa por alto es que cuando los jugadores se enfrentan a ti, generalmente lo harán con rangos más fuertes, y también se moverán con rangos más fuertes tras el flop. Es por esto por lo que resulta tan importante no perder el autocontrol y empezar a ir de farol y presionar la mesa a lo loco. Ataca y aprovecha su pasividad, pero, si percibes algún tipo de resistencia, protege tu valiosa pila de fichas.
Presiona las pilas de fichas pequeñas y medianas. Si se equivocan, acabarán en la calle. Esa es una amenaza poderosa.
Presiona en las burbujas clave. Las mayores burbujas son las que se producen antes de alcanzar los premios (se pasa de no tener nada a contar con algo tangible) y la burbuja de la mesa final. Si tienes la pila de fichas más grande, puedes abrir con libertad en las burbujas, ya que algunos jugadores simplemente van a esperar a que reviente y se van a retirar con todo lo que no sea una mano muy fuerte. Sin embargo, hay algo muy importante que debes tener en cuenta: aunque está bien abrir con frecuencia, en general no debes igualar subidas que procedan de pilas medianas con manos débiles o marginales, ya que lo normal será que, en estas situaciones de burbuja, estas solo apuesten con las manos más fuertes.
Presta atención al tamaño efectivo de la pila de fichas. Recuerda: puede que tengas 80 CG, pero, si subes desde el botón contra una ciega pequeña que tiene una pila de 12 CG y una ciega grande con 11 CG, estás jugando en una situación con un margen estrecho. No pierdas esto de vista y mantente atento a los tamaños de las pilas de fichas que todavía estén en la mano cuando pienses en involucrarte.
Evita enfrentamientos con otros jugadores con grandes pilas de fichas. Una vez más, para ser claros, esto no sugiere que te limites a tirarte de todo cuando haya otra pila grande involucrada. Tener muchas fichas resulta muy valioso y merece la pena proteger ese valor. Piensa en ello como cuando dos superpotencias están a punto de declararse la guerra: está bien tener pequeñas escaramuzas, pero, cuando se saca la artillería pesada, es conveniente que lleves las buenas.
¡Tener una gran pila de fichas en un torneo es muy divertido! Tus apuestas suelen tener más peso, ya que la supervivencia en el torneo de tus rivales está en juego, mientras que la tuya no. Puedes abrir más pozos con facilidad, tienes más espacio para maniobrar tras el flop en un gran número de situaciones y todos los recursos de tu arsenal están a tu disposición. Trabaja para seguir aumentando tu pila de fichas, al tiempo que la proteges cuando te encuentres con alguna resistencia, y pronto te veremos llegar a la mesa final como el líder de fichas.