La mesa final

Llegar a una mesa final de un MTT es algo muy complicado. Incluso los mejores jugadores tienen problemas para llegar a las mesas finales con lo que, una vez en ella, ya podemos estar orgullosos de nuestro trabajo. Con todo, nunca debemos ser conformistas.

Dado que no es algo que nos sucederá con mucha frecuencia, debemos estar preparados de la mejor forma posible y, una vez allí, hacer nuestro mejor juego. Ya hemos visto que los premios más importantes en un torneo de poker se reparten en la mesa final. Además, los premios más jugosos se reparten entre los tres últimos jugadores. Una vez aquí, todavía hay una diferencia muy importante entre caer en el noveno puesto o acabar el primero.

Debemos prepararnos para pelear por los tres primeros puestos una vez que hemos llegado a la mesa final. A continuación veremos unos consejos que nos permitirán avanzar en la dirección correcta.

DETECTANDO LA DEBILIDAD EN NUESTROS OPONENTES

Las mesas en los torneos multimesa siempre se rompen para llevarnos a una nueva mesa. Bueno, todas no, la mesa final no lo hace. Permaneceremos en la misma posición ante a los mismos rivales por lo que resta de torneo. Esto nos dará tiempo suficiente para estudiar a nuestros oponentes. Siempre con una idea en nuestra mente, si queremos ganar el torneo tendremos que superarlos a todos.

El salto de premios entre una posición y otra siempre es interesante. La situación es muy similar a la que ya vimos durante la burbuja: Muchos jugadores tendrán un único objetivo en esta mesa final, sobrevivir todo lo que puedan e incrementar poco a poco el importe de su premio.

Igual que hacíamos en la burbuja, debemos identificar a estos jugadores y aplicar toda la presión que podamos sobre ellos.

Aunque depende mucho de la estructura del torneo y el número de jugadores, en una mesa final los stacks son muchas veces muy grandes con respecto a las ciegas. Contamos con la ventaja de que no nos encontraremos all-in pre-flop con mucha frecuencia, pero tendremos que enfrentarnos a decisiones más complicadas post-flop.

CÓMO ENFRENTARSE A LOS STACKS GRANDES.

En ocasiones, uno o dos stacks mucho más grandes que el resto (lo que veremos muchas veces como su término inglés como Big Stacks) intentarán aprovechar, igual que debemos hacer nosotros, su posición de privilegio para dominar la mesa. Tratarán de forzar al resto de rivales a abandonar sus manos de forma prematura. Cuando en lugar de ser el abusón nos encontramos en una situación en la que tenemos que enfrentarnos a un stack así, debemos tener claro que, cuanto menos resistencia ofrezcamos, más fácil será para ellos controlar el torneo. Eso provocará que nos alejemos de las posiciones mejor pagadas.

La verdadera fuerza de un Big Stack está en la amenaza que supone para nosotros tener que enfrentarnos a ellos. La mejor forma de desactivar su ventaja pasa por dos puntos críticos:

1. Evitar jugar manos marginales frente a ellos. Hay manos que son perfectas para jugar contra un stack similar al nuestro o un stack muy corto, pero pueden ser muy peligrosas y complicadas de jugar contra uno de estos stacks.

2. Cuando nos enfrentemos a ellos en una mano no debemos dejar que nos intimide. Nuestro juego debe de ser más agresivo y decidido de lo que lo es habitualmente. Si somos los primeros en empujar todas nuestras fichas al centro de la mesa, les negaremos la posibilidad de echarnos de la mano. De hecho, sus opciones de igualar nuestra apuesta pasarán por la posibilidad de que tengan una buena mano. Como podemos ver, frente a su agresividad nuestra mejor defensa consiste en atacar primero.