Ingresar en la mano

En lecciones anteriores hemos visto cómo valorar la fuerza de nuestra mano. Ahora es el momento de decidir cómo la queremos jugar.No vamos a cansarnos de repetir, y debemos tenerlo siempre claro, que no existen reglas generales en el poker y que, en muchas ocasiones, las circunstancias pueden condicionar que la mejor opción sea alejarse de la regla general. En cualquier caso, en la ronda de apuesta preflop nuestras opciones serán siempre las mismas: jugar la mano (igualando la apuesta o subiéndola) o no jugarla (tirando nuestras cartas).

 

Nuestra decisión estará determinada por lo que vaya sucediendo en la mano y dependerá principalmente de tres condicionantes:

  • La fuerza de nuestra mano.
  • Nuestra posición en la mesa.
  • Las acciones de nuestros rivales.

GRUPOS DE MANOS INICIALES

En las lecciones anteriores ya vimos qué hace a una mano más fuerte que otra. Esto nos permite clasificar las manos en grupos un poco más amplios, que nos facilitan planear la estrategia de juego de estas manos.

Las manos más fuertes se llaman “Manos Monstruos o Premium” y las más débiles “Manos Basura”. Entre ellas incluiremos un par de categorías adicionales.

Grupo 1: Monstruos

A A, K K , Q Q y según a quien preguntemos A K

Las parejas más altas son las mejores manos iniciales en Texas Hold’em, siendo los Ases los mejores. Son manos monstruosas y deberíamos jugarlas siempre, desde cualquier posición e incluso frente a subidas anteriores de otros jugadores. El poker actual es un poker de iniciativa y agresividad, con lo que siempre que tengamos un “Monstruo” deberíamos subir la apuesta.

Es muy importante que tengamos claro que, casi en el 100% de las ocasiones, subir la apuesta con estas manos será el movimiento correcto y que, no hacerlo, será casi siempre un error. Debemos evitar la tentación de igualar la apuesta para esconder nuestra mano y atrapar al rival. Recordemos que buscamos un poker directo y agresivo. Cuando tengamos un “Monstruo” nuestro movimiento tiene que ser subir la apuesta para aumentar el valor de nuestra mano y evitar caer en nuestras propias trampas.

Muchos de los jugadores expertos consideran que las combinaciones de Ases y Reyes del mismo palo son manos “Monstruo o Premium”. Están conectadas, son del mismo palo, cercanas en valor y, además, las dos cartas más altas que podemos tener sin formar una pareja. En la mayor parte de las ocasiones son manos muy fuertes y deberíamos jugarlas como tal. Pero mucho cuidado, solo se trata de una mano con As alto si no conectamos con el flop. Por esta razón para algunos jugadores expertos quedaría englobada dentro del siguiente grupo de manos iniciales muy fuertes.

Grupo 2: Manos Muy Fuertes

J J, 10 10 , A K o A Q

Se trata de manos con gran potencial pero menos poderosas que las manos del grupo 1. Este conjunto está formado por parejas inferiores a , o cartas de alto valor conectadas entre ellas. Una combinación de Ases y Reyes de distinto palo tiene un valor algo menor que las combinaciones del mismo palo. Los Ases y Damas del mismo palo se encuentran conectadas pero separadas por una carta adicional, el Rey.

En cualquier caso, en la mayoría de las ocasiones deberíamos subir la apuesta con estas manos fuertes. Aunque no siempre. Si, por ejemplo, nos enfrentamos a una subida y a una resubida de los jugadores que han actuado antes de nosotros, deberíamos ser muy precavidos porque es bastante probable que alguno de nuestros oponentes tenga una mano mejor. Por ello debemos, incluso, considerar abandonar la mano si creemos que es muy probable que alguno de nuestros dos rivales tenga en sus manos una mano del grupo 1 contra la que perderíamos en la mayor parte de las ocasiones.

Grupo 3: Manos Especulativas

Se encuadraría dentro de este grupo cualquier pareja entre 9 9 y 2 2 , cualquier As con un “kicker” entre el J y el 9 , cualquier As acompañado de otra carta del mismo palo, dos cartas altas por encima del 10 (por ejemplo Q 10 y los conectores del mismo palo, separados como máximo por una carta ( 6 7 y 9 7, por ejemplo).

Si nos paramos a pensar qué tienen en común todas estas manos especulativas, si consideramos los criterios de que nuestras cartas forman una pareja, están conectadas o son altas, veremos que normalmente no cumplen con uno, o incluso dos, de nuestros criterios. Si se trata de una pareja no es particularmente alta, si son del mismo palo están bastante alejadas en valor, etc.

Son manos que tienen potencial para mejorar y formar una mano mucho más fuerte, pero por si solas no son particularmente fuertes. En posiciones tempranas seguramente lo mejor sea abandonar si nos reparten una de estas manos porque ante una subida de algún jugador, de los muchos que todavía quedan por hablar, nos enfrentaríamos a una decisión muy complicada.

Sin embargo, en posiciones finales podemos considerar subir la apuesta, especialmente cuando todos los oponentes anteriores han abandonado la mano. Si alguien iguala nuestra apuesta nuestra mano aún tiene muchas posibilidades de mejorar.

Su propio nombre debería ayudarnos a decidir qué hacer ante situaciones complicadas, pero nunca está de más tener los conceptos claros. Si alguien demuestra fuerza deberíamos abandonar la mano, sobretodo si nuestra mano no ha mejorado o si el jugador en cuestión va a hablar en las siguientes rondas de apuestas después de que nosotros hayamos actuado.

Grupo 4: Manos Débiles (o Manos Basura)

Todo el resto de manos se consideran manos iniciales débiles o manos basura.

Se trata de cartas que ni son altas, ni están coordinadas de una forma especialmente interesante. Manos como son muy débiles. Podríamos pensar que son manos con potencial para formar color o escalera pero, en muchas ocasiones, incluso después de formar una de estas manos, sobretodo si el bote se hace muy grande, perderemos la mano.

No deberíamos jugar estas manos salvo que tengamos una muy buena razón para hacerlo. Son manos que deberíamos abandonar sin pensárnoslo dos veces, hasta que ya lo hagamos incluso de una forma mecánica.

IMPORTANCIA DE LA POSICIÓN

Nuestra posición es un factor muy a tener en cuenta. Especialmente en nuestras decisiones preflop. Si quedan muchos jugadores por hablar deberíamos ser muy selectivos con nuestras manos iniciales.

Es importante que evitemos jugar fuera de posición, sobretodo con manos débiles.

PRESTA ATENCIÓN A LO QUE SUCEDE EN LA MESA

Otro factor muy importante a tener en cuenta preflop es lo que han hecho los jugadores que actuaban antes que nosotros. Si un oponente ya ha abierto el bote está claro que tiene una mano con la que quiere jugar. Si lo ha hecho subiendo el mensaje es claro, no sólo quiere jugar sino que estará encantado de jugar un bote grande.

Nuestra selección de manos no es algo rígido, ni una norma que debamos seguir a rajatabla. Igual que ocurre con la posición debemos utilizar la información que nos proporcionan nuestros rivales con sus apuestas, y responder eligiendo cartas mejores a las que normalmente jugaríamos en esas posiciones. De esta forma eliminamos las combinaciones más débiles (lo que en el argot se conoce como cerrar el rango). Nunca podemos saber con certeza qué es lo que tiene nuestro rival, pero deberíamos intentar hacernos una idea en función de la posición desde la que actúa y sus apuestas. A lo largo de los diferentes cursos veremos cómo utilizar esta información para acotar las posibles manos que pueda tener nuestro rival (lo que llamaríamos en poker su rango) para modificar, en consecuencia, las manos iniciales con las que estaremos dispuestos a continuar en la mano contra él.

CONCLUSIÓN

Lo primero que tenemos que hacer cuando recibimos nuestras cartas es considerar si se trata de una mano lo suficientemente fuerte como para que merezca la pena jugarla. Las mejores manos iniciales normalmente consiguen las mejores combinaciones cuando todas las cartas están boca arriba, con lo que esta primera decisión afectará de forma inevitable e inmediata a todo el resto de decisiones que tengamos que tomar durante la mano.

Cuando estamos empezando en el poker, lo más sensato que podemos hacer es jugar las manos fuertes y abandonar las demás. Es muy importante desde el principio desarrollar un juego consistente y no debe avergonzarnos ni impacientarnos tener que estar abandonando una mala mano tras otra, porque nos quedan todavía muchas, pero que muchas manos por jugar.

Es muy importante que tengamos claro que una vez que hemos decidido jugar una mano lo hagamos de forma sólida y agresiva.

Nuestra atención siempre tiene que estar en lo que sucede en la mesa. Nuestros rivales nos darán información sobre la fuerza de sus manos cuando apuesten o suban la apuesta y tenemos que estar concentrados en el juego para recoger esa información.

Recuerda que siempre tenemos que tener en cuenta nuestra posición cuando estamos evaluando la fuerza de nuestra mano.